En un ecosistema emprendedor se suman esfuerzos, recursos, conocimientos, perspectivas, capacidades y potencialidades de distintas organizaciones para conseguir más de lo que cada una de las entidades podría alcanzar de forma aislada. Es un equipo.
Defendemos que el mundo cambia rápido y que todo lo que conocemos evolucionará en un corto plazo de tiempo, en unos 5 o 10 años, y en este cambio los ecosistemas emprendedores van a jugar un papel protagonista. No lo perdamos.
Un ecosistema emprendedor debe ser dinámico e innovador. Ya lo sabemos, la innovación es la creatividad puesta en práctica y, a su vez, la creatividad es la inteligencia en acción. Ese debe ser nuestro entorno, nuestro hábitat. En la provincia de Cádiz nos enorgullecemos de nuestro pensamiento creativo, imaginación, talento, chispa, ingenio. Vale, pues ahora tenemos que crear el hábitat adecuado para que se ponga en práctica y genere valor económico-social.
En nuestra anterior entrada hablábamos de actores en el ecosistema emprendedor ¿recuerdas? Hoy hablaremos de roles, del papel que cada uno de esos actores puede o debe desempeñar. En este sentido, hay muchas clasificaciones que usando diferentes criterios establecen diferentes roles.
Hoy vamos a usar una que nos gusta mucho. Realmente no es del ámbito del ecosistema emprendedor, sino de la gestión de equipos, pero…confiar en nosotros, a ver si os gusta.
Actores fuego
El rol del fuego es el de iniciarlo todo, es el de aportar. Son los actores que nos traen ideas innovadoras, propuestas de programas y colaboraciones, siempre buscando la creación de espacios y plataformas para que todos colaboremos de forma activa. Poseen conocimiento e impulsan la creación de nuevos proyectos innovadores. Suelen ser emprendedores, o incuso organizaciones más estables, con personas inquietas.
Pero ya lo sabes, solos no hacen nada.
Actores aire
Grandes aliados de los anteriores, animan al fuego. Son actores seguidores de las ideas planteadas, entusiastas y mejoradores de ellas, aportando sus ideas y propuestas para afinar mejor las ideas innovadoras. Alimentan de recursos al ecosistema para facilitar el buen desarrollo de nuevos proyectos innovadores. Ofrecen recursos e infraestructuras, talento y experiencia, etc. Suelen ser emprendedores, pero también entidades públicas o privadas que tienen por objetivo conectar organizaciones con intereses similares para crear sinergias e impulso.
Pero ya lo sabes, solos no hacen nada.
Actores agua
No, no pienses en los aguafiestas, aunque a veces lo puedan parecer. Estos actores son los que aportan estabilidad, mesura, sentido común. Sin ellos todo ardería rápido. Son actores experimentados, juiciosos y tranquilos. Saben que el camino es largo, y que hay que ir con paso firme. En este caso, suelen ser entidades que poseen interés público y social.
Pero ya lo sabes, solos no hacen nada.
Actores tierra
Son los actores que dicen “del tirón”, se remangan y se ponen a trabajar. Estos trabajos pueden ser muy diversos, propios en el programa o incluso de divulgación y comunicación. También aportan recursos para el buen desarrollo de los nuevos proyectos. Este último rol lo pueden desarrollar los medios de comunicación. Con lo que fíjate si todos somos importantes.
Pero ya lo sabes, solos no hacen nada.
Y esto nos lleva a concluir que todos somos/sois necesarios, que todo esto debe ser desarrollado en colaboración, creando una comunidad. Comunidades formales o informales, creadas con el objetivo de compartir, de apoyarnos, de influenciar, de actuar. Donde todos seamos bien recibidos, manteniendo nuestra independencia o autonomía, pero buscando puntos de encuentro. ¿El objetivo? Saber aprovechar todo nuestro potencial, pasando a la acción.
